Contacto Escríbenos

10 Errores comunes de hosting a evitar

¿Estás a punto de lanzar tu web o ya tienes una y notas que algo no va bien? No eres el único. Elegir un servicio de hosting es una de las decisiones más importantes que tomarás para tu proyecto digital, aunque muchos lo traten como un simple trámite técnico.

Un sitio web rápido, seguro y siempre disponible no es un lujo, es una necesidad. El alojamiento influye directamente en la experiencia del usuario, en el posicionamiento en buscadores y en la conversión de tus visitas en resultados reales.

En Infoser, como agencia digitalizadora, hemos acompañado a decenas de negocios que sufrían caídas constantes, webs lentas o problemas de seguridad, todo por errores evitables en su elección de hosting. Por eso hemos creado esta guía clara y directa, para ayudarte a evitar los errores más comunes y asegurar que tu web rinda al máximo desde el primer día.

Contenidos


1. Elegir un hosting solo por el precio

Uno de los errores más habituales es priorizar el bajo coste sobre la calidad del servicio. Muchos proveedores ofrecen planes extremadamente baratos que, al analizarlos en profundidad, carecen de recursos mínimos para garantizar la estabilidad del sitio.

Un hosting económico suele implicar:

  • Baja velocidad de carga
  • Limitaciones en transferencia de datos
  • Mal soporte técnico
  • Altos tiempos de inactividad

Una web lenta o inestable no solo afecta a la experiencia del usuario, sino que perjudica directamente tu posicionamiento SEO. Google penaliza los sitios lentos y premia a los que ofrecen una buena experiencia.

Qué puedes hacer

Antes de contratar un hosting, no mires solo el precio. Revisa bien lo que incluye cada plan y asegúrate de que cubra lo que necesitas. Algunos puntos importantes:

  • Que sea rápido y estable. Busca opiniones o valoraciones de otros usuarios.
  • Que tenga buen servicio de atención al cliente, disponible siempre que lo necesites.
  • Que ofrezca espacio suficiente y aguante el número de visitas que esperas.

No se trata de contratar el más caro, sino el que te dé mayor confianza y te ayude a que tu web funcione bien desde el primer día. A veces, pagar un poco más te ahorra muchos problemas después.

2. No elegir el tipo de hosting adecuado

Hay diferencias esenciales entre un hosting compartido, VPS, dedicado o en la nube. Escoger el tipo incorrecto puede limitar el crecimiento de tu proyecto.

  • Hosting compartido: adecuado solo para webs muy pequeñas.
  • VPS (Servidor Privado Virtual): ideal para sitios con crecimiento progresivo.
  • Servidor dedicado: máxima potencia para proyectos con alto volumen de tráfico.
  • Hosting en la nube (cloud hosting): escalabilidad y disponibilidad excelentes.

Evaluar mal las necesidades técnicas de tu web puede terminar saturando el servidor, provocando errores 500, lentitud y caídas frecuentes.

La mejor forma de evitarlo

  • Antes de contratar, piensa en cuántas visitas esperas recibir y qué tipo de contenido tendrá tu web (por ejemplo, tienda online, blog, vídeos…).
  • Valora si tu sitio crecerá en los próximos meses. Así podrás elegir un plan que no se quede corto demasiado pronto.
  • Si dudas entre varias opciones, no lo dejes al azar. Contacta con el proveedor y explica tu caso.
  • Un buen servicio te orientará sin tecnicismos y te dirá qué plan se adapta mejor a tus necesidades actuales y futuras.

Elegir bien desde el principio te evitará dolores de cabeza y hará que tu web esté lista para crecer cuando lo necesites.

3. No comprobar dónde está ubicado el servidor

Muchas personas no se fijan en dónde está ubicado físicamente el servidor de su página web, pero es un detalle muy importante. Si, por ejemplo, tienes un negocio en España y el servidor está en Estados Unidos o Asia, tu web puede tardar más en cargar para tus visitantes.

Cuanto más lejos esté el servidor de tus usuarios, más lento será el acceso a tu sitio web. Esto afecta directamente a la experiencia del usuario y también al posicionamiento en buscadores, ya que Google valora las webs rápidas y bien optimizadas.

¿Cómo prevenirlo?

Revisa en qué país están sus servidores. Aquí tienes algunas recomendaciones fáciles de seguir:

  • Si tu público está en España o Europa, elige un proveedor que tenga servidores en esta zona. Así tu web se cargará más rápido para la mayoría de tus visitantes.
  • Si tu web recibe visitas de varios países, puedes usar un sistema llamado CDN (Red de entrega de contenidos). Esto hace que tu página se cargue desde el lugar más cercano a cada usuario, aunque tu servidor principal esté lejos.
  • Pregunta al proveedor dónde están sus servidores y si incluyen CDN en sus planes. Algunos lo ofrecen sin coste adicional.

Elegir un servidor cercano al público que quieres alcanzar hará que tu web cargue más rápido, mejore su posicionamiento y ofrezca una experiencia mucho más fluida.

4. Ignorar si el proveedor garantiza buen tiempo de actividad

El tiempo de actividad, también conocido como uptime, es el porcentaje de tiempo que tu web está operativa y accesible para los visitantes. Si tu sitio se cae constantemente, los usuarios no podrán entrar, perderás ventas y darás una imagen poco profesional.

Este problema es muy común en hostings de baja calidad, que no están preparados para ofrecer un servicio estable. Incluso una caída de pocos minutos al día puede traducirse en pérdida de clientes y bajada en el posicionamiento en Google.

Qué debe ofrecer un buen proveedor

  • Comprueba que el proveedor garantice al menos un 99,9 % de disponibilidad. Ese es el estándar que asegura que tu web estará online casi todo el tiempo.
  • Evita los hostings que no muestran esta información de forma clara. Si no publican su nivel de estabilidad, probablemente no puedan garantizarlo.

Si tu web se cae con frecuencia y el soporte no responde, lo más sensato es cambiar de hosting cuanto antes.

5. Contratar un plan que no puede crecer contigo

Muchos proyectos comienzan con una web sencilla, pero a medida que crecen, necesitan más recursos. Contratar un hosting que no permita escalar fácilmente implica que tendrás que migrar a otro proveedor en el futuro, lo cual acarrea costes, riesgos y pérdida de posicionamiento.

Qué tener en cuenta

  • Elige un proveedor que te permita subir de plan fácilmente, sin tener que cambiar de empresa ni mover todo manualmente.
  • Asegúrate de que puedas ampliar recursos cuando lo necesites, como espacio en disco o capacidad para más visitas.
  • Consulta qué opciones hay para crecer y si el cambio a un plan superior es automático o requiere intervención técnica.
  • Piensa a medio plazo. Aunque tu web sea pequeña hoy, elige un hosting que pueda crecer contigo sin poner trabas.

Un buen hosting debe acompañarte desde el primer día, pero también estar preparado para lo que venga después.

6. Olvidar revisar si el hosting es seguro

Las amenazas digitales están a la orden del día: virus, ataques, robos de datos. Si tu hosting no protege tu web correctamente, estás dejando una puerta abierta a los problemas. Además, Google puede marcar tu sitio como peligroso si detecta algo sospechoso.

Evítalo así

  • Asegúrate de que tu hosting incluya un certificado de seguridad (SSL). Esto hará que tu web empiece por “https://” y sea segura para los visitantes.
  • Pregunta si tienen sistemas que bloquean ataques y detectan virus o comportamientos sospechosos.
  • Verifica que hagan copias de seguridad automáticas y frecuentes, para recuperar tu web si algo sale mal.

Un proveedor serio no solo aloja tu web, también la protege.

7. No asegurarse de que se hagan copias de seguridad

Un fallo del sistema, un error al actualizar o un ataque informático puede borrar tu página por completo. Si no tienes una copia guardada, puedes perder todo tu trabajo. Y lo peor es que pasa más a menudo de lo que crees.

Cómo proteger tu información

  • Comprueba si el hosting hace copias de seguridad diarias y automáticas, sin que tú tengas que pedirlo.
  • Pregunta cuántos días se guardan esas copias y si puedes recuperar una versión anterior con facilidad.
  • Evita hostings que te cobren extra por restaurar tu web en caso de problema. Es un servicio básico que debería estar incluido.

Tener copias de seguridad no es opcional. Es tu salvavidas si algo falla.

8. Contratar un hosting sin soporte técnico las 24 horas

Los errores técnicos pueden aparecer en cualquier momento, incluso de madrugada o en medio de una campaña importante. Si no hay nadie que te atienda, te quedarás esperando mientras tu web está caída o funciona mal.

Lo que deberías buscar

  • Asegúrate de que el hosting tenga asistencia las 24 horas del día, todos los días del año.
  • Consulta cómo puedes contactar: chat, teléfono o correo. Cuanto más directo, mejor.
  • Haz una prueba antes de contratar: escribe al soporte con una pregunta sencilla y comprueba cuánto tardan en responder y cómo lo hacen.

Un buen servicio técnico te da tranquilidad. No deberías esperar horas para solucionar un problema urgente.

9. No asegurarse de que el hosting soporta tu tipo de web

Si vas a crear tu web con WordPress, Prestashop u otra plataforma, necesitas un hosting que esté preparado para funcionar bien con ella. Si no, la web irá lenta, dará errores o será difícil de actualizar.

Recomendación

  • Elige un hosting que indique claramente que es compatible con la herramienta que vas a usar, como WordPress, por ejemplo.
  • Comprueba si ofrecen instalación en un solo clic, para que puedas empezar rápido y sin complicaciones.
  • Evita proveedores que no hablen específicamente de tu plataforma, ya que pueden no estar optimizados para ella.

Tu web necesita un entorno adecuado para funcionar bien. No basta con “funcionar”, debe hacerlo rápido y sin fallos.

10. No leer bien las condiciones del contrato antes de pagar

Muchos hostings anuncian precios muy bajos para el primer año, pero cuando llega el momento de renovar, la cifra se dispara. Además, algunos incluyen cláusulas ocultas que te obligan a pagar por servicios básicos.

Pasos para solucionarlo

  • Lee todo antes de contratar, sobre todo la letra pequeña. No te fijes solo en el precio inicial.
  • Consulta cuál será el precio cuando llegue el momento de renovar, y si hay permanencias o penalizaciones.
  • Evita los hostings que ocultan información, cambian condiciones sin avisar o cobran por funciones esenciales como el soporte o los certificados SSL.

Elegir un buen proveedor es también asegurarte de que no te engañen. Transparencia y claridad son igual de importantes que el rendimiento.

El hosting importa más de lo que crees

Contar con un buen servicio de hosting es fundamental para asegurar el rendimiento, la seguridad y el crecimiento de tu web. No se trata solo de alojar archivos, sino de garantizar que tu sitio esté siempre disponible, funcione con rapidez y esté preparado para escalar cuando tu negocio lo necesite.

En Infoser, te ayudamos a elegir la mejor opción para tu proyecto y a evitar errores que pueden salir caros. Si necesitas asesoramiento personalizado, estamos aquí para ayudarte a tomar la mejor decisión.

Contáctanos y encuentra el hosting que tu web realmente necesita.

Scroll al inicio